"Una prensa cínica, mercenaria y demagógica producirá un pueblo cínico, mercenario y demagógico". Joseph Pulitzer….
El periodista Miguel Salazar, se ha convertido en el mejor hombre de la revolución bolivariana para terminar de enterrarla, ha montado una estructura comunicacional (su semanario y Canal I) dentro del gobierno bolivariano para atacar a sus enemigos políticos. Primero ha ido por las cabezas de críticos de la revolución: Giordani, Navarro, Evans, Ana Elisa, Silva, Cliver, y otros más. Después, por la oposición en la cabeza de Ramos Allup, y los llamados bolichicos, y de los actuales dueños de Globovisión. Mañana les puede seguir tocando a la iglesia, y a cualquiera ciudadano que se atreva a criticar. Por mucho menos que esto, a Carlos Andrés Pérez II, se fue con deshonor del poder.
El Gobierno comete un grave error, al utilizar a mercenarios cloacales tarifados, como el otrora periodista veraz, y talentoso llamado Miguel Salazar, en un mal beneficio propio, y en contra de la oposición. Esto que está pasando no es una invención basta leer las verdades de Miguel en su edición 599 del 14 al 20 de octubre 2016. Miguel Salazar el ahora editor tarifado de la prensa chicha, está terminando de dañar al gobierno de Nicolás Maduro, al hacerle un flaco favor a la democracia, y al principio de división de poderes. Atrás quedaron los editoriales de aquel Miguelacho que escribía hace años desde el semanario Quinto Día, y las Verdades de Miguel. Cuando se refería con la crítica dura, y propositiva al Gobierno de Chávez, claro, al que siempre acusaba de una "cacería política", en contra de la oposición, y la disidencia, así como el caso Baduel. El tiempo, y las pruebas, han expuesto al desprecio público a los que han vendido su dignidad, por el tan ansiado puñado de dólares. Y el sitio de Miguel Salazar hoy, está ocupando el sitial más profundo de la cloaca politiquera.
Que se haya puesto en marcha un G2 comunicacional cloacal, es algo que ha terminado de sorprender a los lectores nacionales e internacionales. El ex talentoso periodista Miguelacho Salazar lleva casi dos años publicando decenas de desinformación que ocultan el descontento popular como la: inflación, escasez, largas, colas, especulación, inseguridad, mala calidad de vida, que hacen estragos en la vida del venezolano, donde los más jóvenes han comenzado a emigrar, al no ver futuro en la patria de Bolívar. Miguel Salazar desde su semanario, y ahora la TV canal I ha creado su propia policía política comunicacional; un sebincito para acosar a los críticos, y opositores, y activar investigaciones sin pasar por el control de los organismos jurisdiccionales. De ahí, que de esa cloaca, salgan informaciones sin sustento ni argumento alguno, el ahora periodista chicha está siempre por ahí rodilla en tierra, para confundir y calumniar.
Quien le pondrá la tapa a esa cloaca comunicacional en la que se está salpicando a todo el mundo, buscando que la actual legislatura nacional electa democráticamente el 6D del 2015 salte por los aires. Esta es la prueba definitiva que contradice lo dicho por Diosdado Cabello Rondón recientemente en Tucupita, de qué apartemos los odios, y sectarismos, y entremos en unidad, para corregir los errores del Gobierno de Nicolás Maduro que hemos tenido, y recuperar su bajísimo nivel democrático. No se puede usar al TSJ en contra de la oposición violando la constitución. ¿No es esto lo, que hacia el estalinismo en la URSS, y por el cual se derrumbó?
Este periodista tarifado se debe retirar a meditar en el Valle de los Caídos, porque está actuando como lo hacían los jefes de las policías de los estados totalitarios del siglo XX. Nada es gratis se ve que hay una buena tarifa por sus servicios, pero también por su silencio, ante la grave situación económica que está atravesando Venezuela; junto al silencio cómplice de tantos medios de comunicación, que miran hacia otro lado porque se alimentan de la cloaca de la ignominia, tan nutritiva en publicar, medias verdades, y mentiras.
Hoy, ante esta grave crisis económica que tenemos, algunos argumentan que el caso M. Salazar nace de ahí, del ocultamiento de la realidad. Es muy probable que así sea, pero cabe preguntarse también qué clase de Estado Socialista tenemos cuando solo se persigue a críticos, y opositores, porque los corruptos además de robar, destruyen a Venezuela.
La estrategia en contra del revocatorio no solo es profundamente antidemocrático. También es inútil: Chávez se hubiera contado entes de encochinar aún más la política venezolana, esto solo ha servido para unir aún más, a los descontentos en contra del gobierno bolivariano, si cabe esta acotación, y también como coartada para abyectos corruptos, que encuentran en esta causa su vía de escape. Si esto es revolución, incluso a mí, que no soy tan joven, me entran ganas de irme también al exilio. Si ellos son la revolución, entonces yo seré la contrarrevolución.
Casualmente, presumo que el trabajo de ‘miguelacho’ es para atizar una enorme guerra interna en las cúpulas del psuv, y del gobierno bolivariano. No hay que ser un ‘picure’ para entender estas casualidades. Quien se acueste con este tarifado, cagado se levanta.
El Gobierno de Nicolás Maduro tiene que entender que el problema es económico. Donde hay que respetar el estado de derecho, para que venga la confianza, y la inversión, hay que encomendarse a Dios, y no pactar en el alto gobierno con el diablo. Manuel se ha puesto a pescar "contrarrevolucionarios" en su cloaca, y ha terminado quedándose frio sus ejemplares en los kioscos, por venir editados de esa fosa séptica purulenta. Pero miguelacho presumo no está actuando solo ni es el único responsable. Hay que terminar con la camorra entre los poderes del estado venezolano. ¿Reconociendo de una vez, y sin medias tintas si somos un Estado democrático o, somos un Estado totalitario? Para saber de una vez si estamos en presencia de la liquidación del Estado democrático.
