Aristóbulo Isturiz, Iris Varela, Elías Jaua, Jorge Arreaza, es ¡El primer motor!

Así es camaradas se trata de dar respuesta a uno de los principales problemas que tiene el país, quizá el más importante, al punto que fue colocado en el primer lugar de prioridades dada la guerra económica que nos ha planteado el empresariado importador en alianza con los inescrupulosos comerciantes a los cuales se le sumó el nefasto bachaquerismo antes conocido como comerciantes informales todos ellos dirigidos y aupados por la irresponsable casta política burguesa y parasitaria con sus ansias de poder, se trata nada más y nada menos que de la soberanía agro-alimentaria.

Cuando decidí dedicarme a la producción agrícola sabía que tenía que lidiar con las vicisitudes climáticas, costos de producción, mano de obra, las penurias del acarreo, la inseguridad, la inversión en capital durante los ciclos productivos de los diferentes rubros, en algunos de hasta un año, otros como el cacao, el café, la naranja hay que esperar varios años para cosechar, etc., sabía que no era fácil, lo que no tomé en cuenta y nadie me advirtió fue sobre el modelo de comercialización de los productos agrícolas.

Una vez que estaba montado en el burro comienzo a cosechar; es cuando me encuentro con el primer intermediario de la cadena conocido como el "arrumador" quien ya tiene fijados los precios, compran utilizando el método del chantaje; "lo toma o lo deja" sobre todo en los rubros altamente perecederos (en este caso específico el cambur), todos ellos "cartelizados" y organizados a lo largo de las vías principales, los cuales sirven de centro de acopio al segundo intermediario conocido como "el transportista", este entrega la carga recolectada al "mayorista", quien se encarga de distribuirla al cuarto intermediario encargado de venderla al público consumidor.

El PROBLEMA REAL es que por mi producto recibí como retribución por un año de trabajo e inversión solo el 10% del PVP, mientras que el Arrumador recibió ¡EN UN SOLO DIA! La misma cantidad duplicando su inversión, luego me entero que el transportista también duplica su inversión también en ¡UN DIA!, percibiendo cuatro (4) veces lo que yo recibí en un año, luego el mayorista también duplica su inversión percibiendo ocho (8) veces y por último el detallista también gana lo suyo por lo general duplicando su inversión.

Ocho años me tomó analizar las causas y los efectos del problema, aplique mis conocimientos de la Economía Política para tratar de desentrañar la extraña incógnita del porque razón NADIE le entro de frente a resolver el problema, porqué nadie percibió la silenciosa migración del campesino a las ciudades, para ello solo había una respuesta "EL RENTISMO PETROLERO" ¡FALSO!, el campesino abandonó al igual que otros pequeños y medianos productores porque sencillamente ¡NO HAY GANANCIA!, ¡no es rentable!, porque el 90% de la utilidad se queda en manos de los intermediarios capitalistas, esto ha sido por décadas pero peor aún en estos 17 años de proceso revolucionario, es una utopía pensar que vamos a ser potencia agrícola en base a la agricultura urbana, aunque confieso es una muy importante alternativa ante la guerra agro-alimentaria pero no la solución a la población campesina y a los productores agrícolas quienes requerimos de una ganancia más justa para ser más productivos y eficientes.

Una vez culmino el trabajo de investigación y ante un profundo análisis de las causas del problema, las acciones hechas o dejadas de hacer, sus efectos micro y macro, me dispongo a proponer el que hacer, como hacerlo, conque hacerlo y con quien, es decir presente un plan agrícola nacional, propuse una ley de Protección al Campesino así como el alerta ante un plan imperial que tiene mucho que ver con el ALCA, incluso presente un plan de "DEFLACION", (contrario a la inflación) científico, con su respectiva formula y en formato Excel, bueno, lo cierto es que pensé que ya "el mandado estaba hecho", pero no, lo que yo no sabía es que después de todo eso me iba a encontrar con el más grande y terrible de todos los problemas.

He hecho todo lo que humanamente pude hacer, desde ir a dormir en el suelo y comer mal en los congresos campesinos donde los fulanos delegados campesinos que no son campesinos sino operadores políticos de gobernadores, directores, alcaldes y hasta ministros estaban más interesados en sus apetencias personales y políticas que en resolver los problemas de los productores campesinos, he tocado las puertas y entregado la propuesta a gobernadores, alcaldes, legisladores, diputados, me dirigí a la AN a entregar la propuesta y no encontramos a quien entregarla porque allí no había una comisión ni siquiera una sub-comisión agrícola a pesar de haber17 diputados campesinos, le he entregado la propuesta a líderes de las misiones productivas, partidos políticos a través de las redes sociales, a las instituciones que tienen que ver con la parte agrícola y nada ni una sola respuesta.

Yo sé que muchos estarán pensando que se trata de un bodrio, un chorro de babas, que cuando lo intentan ver de inmediato va a la cesta de la basura, en fin que es una locura lo que presento, pero no camaradas, en las ocasiones que he tenido la oportunidad de hacer la presentación del proyecto de manera interactiva se nota en la participación el interés que el tema despierta, la denuncia del problema es real e irrefutable, se de buena fuente que ha habido personas de alto nivel político que han querido ganar indulgencias con escapulario ajeno pero no dominan el discurso producto de la investigación sobre todo en el área científica y al no ver la ganancia desisten y este es el grave problema al que me refería en el párrafo tras anterior es nada más ni nada menos que "EL BUROCRATISMO Y LA DESIDIA DE LOS CUADROS MEDIOS DEL GOBIERNO" que para nada les interesa el destino de la patria, solo se mueven cuando ven alguna ganancia, eso también lo incluyo en la propuesta que rompe paradigmas entre ellos el sistema de comercialización agro-alimentario y el Burocratismo que a mi manera de ver y ante los resultados del trabajo de investigación son entre otras las principales causas de la no productividad en el sector agrícola.

 



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Gonzalo Ochoa Díaz


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