Auditórium

Cuando el estalinismo me golpea: ¡Me dan ganas de abrazar a Satanás!

"El periodismo o es libre, o es una farsa"

Rodolfo Walsh…

Cuando escribo mi columna siempre intento, ponerle el tono exacto, de lo que la gente en la calle me dice de la actual situación económica de Venezuela, y trato de enviar sus mensajes imprimiéndolos en la mía: "pero cuando no la publican me preguntan". ¿Que fue arrugaste? Soy una persona muy alejada de los eternos delirios fundamentalistas, en la transmisión de miedos a la ciudadanía, muy alejado del estalinismo en la imposición de ideas caducas, y la transferencia de culpas a terceros por el actual descalabro económico. En mi correo que pongo al final de mis artículos en www.aporrea.org en 10 años he recibido insultos, descalificaciones, amenazas de toda índole, de parte de un fanatismo de la extrema izquierda llenos de ignorancia y de resentimiento.

Ejemplo de lo primero es el ‘doctor - magister’ que siempre ataca mis artículos en este portal los cuales no respondo por las sandeces de sus exposiciones. Ante el triunfo de la oposición el 6D, otros dicen: "Bueno, ahora viene el país potencia, la Venezuela productiva". No, a todos lo que me aborrecen por mis comentarios, ¡NO!, la reserva en dólares es lo que se acabó, y espero que no sea para siempre: las importaciones o compra de alimentos en el exterior subsidiado por el Estado lleno de corrupción, de rubros que se podían producir en el país nos llevaron a esta catástrofe. Los que siguen con un discurso trasnochado de pacotilla, en lugar de admitir con soltura de la lengua, su falta de inhibiciones intelectuales se rasgan las vestiduras, porque hablar de que el problema es la fulana guerra económica no se dan cuenta que esto equivale a seguir entregando el país a la voracidad del burocratismo corrupto importador, y al empresariado boliburgues de maletín especulador. Es la mezcla exacta de ignorancia, y resentimiento de la que deberíamos ser capaces de prescindir para poder sacar a Venezuela de este atolladero económico.

Yo como hombre formado en la izquierda cristiana, siempre he dicho que no soy Marxista-Leninista, al igual que el presidente Hugo Chávez, le declaró al periodista norteamericano Sean Penn en "Conversations with Chávez and Castro" y la cual publiqué en www.aporrea.org/actualidad/a189126.html no necesito decir que soy chavista para pensar lo que pienso, decir lo que digo, y criticar al Gobierno por sus actos de gobierno. Es decir, no necesito, ni necesitaré que me pasen la cartilla. Soy incapaz de taparle los errores al gobierno nacional por muchas razones, aunque los altos dirigentes dicen que son de izquierda, pero cada vez que prendo la televisión pública, y escucho a los enrocados de siempre, con el discurso del odio, y la descalificación, me dan ganas de salir a abrazar a Satanás (que Dios me proteja). Habrá que esperar a que el "pueblo residual degastado por las colas", ante un eventual referendo revocatorio, haga reflexionar a más de un farsante engreído y enchufado, de que entiendan que la actual hiperinflación, tiene a la revolución bolivariana en sus últimos estertores para poder salir a discutir en serio políticas de Estado en la AN.



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Edgar Perdomo Arzola

Analista de políticas públicas.

 Percasita11@yahoo.es      @percasita

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