Si en algo ha tenido éxito la mesa de la unidad democrática "MUD" y que debemos reconocer, es el odio que ha sembrado en su militancia, dicho odio se centra en maldecir, humillar, y hasta desearles la muerte a quienes no comparten sus mismos pensamientos, logrando así una militancia con intenciones de sembrar terror y egoísmo.
Por otra parte mientras la MUD nos señala con su dedo de escarnio y nos tildan de marginales, mediocres e ignorantes le hemos demostrado con hechos rotundos que somos nobles, que tenemos respeto a la vida, que buscamos el progreso no solo personal si no colectivo y no solo por las venezolanas y venezolanos si no por nuestros hermanos de otras naciones, tribu y lenguas. Ademas y a pesar de los ataques y consientes del daño que se han causado ellos mismos, son nuestros hermanos y que no dudaríamos en ayudar si en un momento reconocieran que necesitan de muestra ayuda, pero que nos vamos a rebajarnos a su nivel, pues ya estamos en un peldaño tan alto y glorioso que no vamos a ensuciar nuestras mentes con sus manipulaciones mediocres y faltos de argumentos.
Tenemos una vista clara, un enfoque directo. y una conciencia que no vamos a cambiar por ninguna moneda extranjera. Hemos obtenido un sentidos de pertenencia y la satisfacción de querer, de luchar y hasta dar la vida por alcanzar nuestra tan deseada soberanía en su totalidad y defender nuestro legado para las posteridades venideras.
Hemos adoptado el ímpetu de Bolívar, la nobleza de Zamora, el deseo de Miranda, la conciencia de Rodríguez y el valor de Chávez, obteniendo un carácter único de un latino nuevo y comprometido con esta nueva conducta, moldeada por las vivencias de estos quince años y por las persecución de nuestros perseguidores, obteniendo así un temple único e inamovible y asumiendo el protagonismo de un cambio y un estilo de vida único. Lo que lamentamos es que esta militancia llena de odio sembrado por sus líderes sean piedra de tropiezo y no formen parte de la solución, antes bien se presten como lacayos y peones imperiales, para pretender retrasar este proceso de cambio sin darse cuenta que son ellos los que se quedan atrás mientras nosotros avanzamos sin intenciones de detenernos.
Recuerden que la tarea de un líder es llevar a su gente desde donde está hasta donde no ha llegado jamás.
Evalúen hacia donde los han llevado sus líderes. Evalúen si su meta final era tener en sus corazones ese odio, ese egoísmo.
Evalúen los resultados de su nueva conducta hacia su prójimo.
Evalúen a sus líderes.
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