Mafias cambiarias destruyen la economía y la repuesta son llamados de conciencia

A no ser por el equilibrio, la ecuanimidad, la paciencia, la diplomacia del presidente Nicolás Maduro, quizás la historia de este país fuera otra, sin embargo, creo que la cosa tampoco puede ser "ni tan calvo ni con dos pelucas" –y permítanme el trillado adagio-, pero no comparto que el Gobierno pierda tiempo y espacio en los medios de comunicación social haciéndoles llamados de conciencia a Dólar Today, a las mafias cambiarias de la frontera y al Gobierno de Colombia.

Ya lo he dicho otras veces: los hampones que están detrás de Dólar Today y las mafias cambiarias no tienen alma, no tienen corazón, menos conciencia y, sobre el Gobierno de Colombia, qué les puedo decir; no es el caso que el presidente Juan Manuel Santos enviara un avión de la Fuerza Aérea a buscar en Venezuela al expresidente Felipe González, que llegó al país expresamente a defender a los guarimberos y golpistas que quieren tumbar a Maduro…¡no señor!, si bajamos de las alturas del poder y nos metemos en el barrio, nosotros también harías lo mismo por un pana y es obvio que Santos y el facineroso español son panita burda.

Más grave y destempladas fueron las declaraciones de la canciller María Angela Holguin, quien pidió revisar el caso de los deportados; parece que el Gobierno neogranadino aún se encuentra inconforme con el alojo y la protección que Venezuela le da a sus connacionales, a esos mismos que emigran buscando mejores condiciones de vida, desconsideración que a veces desciende, porque muchos de a pie, con los que compartimos el vivir diario, se jactan del valor del peso con respecto al del bolívar, de la prosperidad de la economía del vecino país, sin embargo, a la patria revolucionaria siguen llegando por montones huyendo de su terruño.

En Venezuela hay más de cinco mil nativos de la patria de Santander –cifra suministrada por Maduro en un tuit reciente- que reciben salud, educación, trabajan, han obtenido viviendas, nos acompañan a echarnos los "palos"; se convirtieron, en algunos casos, en otros miembros más de la familia, ¿y eso no lo consideran ni lo valoran?...no puede ser. La mano de la República Bolivariana llega más allá de la línea limítrofe, porque todo ese contrabando de gasolina, de productos de la cesta básica, beneficia a una buena cantidad de gente del otro lado de la frontera olvidada por su propio Gobierno de Bogotá. O, por si lo prefieren, amigos lectores, amigas lectoras, se los digo de otra manera: todas esas mafias del "bachaqueo" de combustibles y artículos alimenticios, nos quitan a los venezolanos la comida de la boca, para llevársela a los colombianos de la raya ignorados por la administración pública de su país dominada por la burguesía santandereana.

Preocupa, en consecuencia, que los voceros del Gobierno revolucionario, por lo menos, públicamente, sólo se limiten a formular llamados de cordura, de atención, a los protagonistas del golpe económico; uno se dispone a ver las noticias con la esperanza de que nos sorprendan con una medida, una operación efectiva tendente a controlar el desabastecimiento, la especulación, los altos costos y nada… lo que se observan son simples señalamientos como para rayar a Dólar Today y a las mafias cambiarias.

Hay que endurecer las acciones o tomar otras, porque la gente siente que esta crisis no terminará nunca…y eso es peligroso, muy peligroso…es obvio como crece cada día el descontento; eso se puede ver, escuchar en la calle, y leer en los medios de comunicación con mucho mayor énfasis en las concurridas redes sociales.



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Alberto Morán


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