Breve nota críticas sobre La Vinotinto

Me permito hacer estas notas antes del pitazo inicial del juego entre Colombia y Venezuela en el marco de La Copa América Chile 2015. La Vinotinto es un fenómeno interesante. Sus resultados han sido mediocres. De hecho, el panorama de nuestro fútbol rentado tampoco exhibe mayores logros fuera de nuestras fronteras, la verdad sea dicha. Sin embargo, La Vinotinto como marca comercial es muy exitosa y por doquier deja su estela propagandística (por el lado del Gobierno) y publicitaria (por el lado de los anunciantes privados como Polar o Movistar). Es interesante cómo los medios escurren el bulto y no toca el asunto Esquivel, quien estuvo envuelto en escándalos de corrupción desde antes del asunto FIFA. Las denuncias fueron varias: el caso del Centro de Alto Rendimiento en Margarita, los boletos para la Copa América en 2007, entre otros. Pero en fin, el Imperio y la justicia suiza sí fueron efectivos y lograron echarle el guante al ex Presidente de la FVF. Lo que lamento es la poca seriedad del periodismo deportivo venezolano que poco o nada dice al respecto.

No hay reportajes de investigación, ni programas especiales, ni discusiones analíticas sobre este tema; simplemente se opta por el silencio cómplice. Menciono a Esquivel porque éste fue el artífice del éxito comercial de La Vinotinto; sin embargo, ese éxito comercial y publicitario no va de la mano con resultados importantes a nivel internacional. Viviremos “toda la vida” del “glorioso cuarto lugar de La Copa América Argentina 2011”; pero no nos detenemos a analizar que el segundo, tercero y cuarto lugar de esa atípica Copa América no clasificó al Mundial de Brasil 2014. Que esos tres países: Paraguay, Perú y Venezuela fueron eliminados porque su fútbol simplemente no creció. Creo que conformarnos con “el casi clasificamos” o con el “casi lo logramos” ya no es suficiente. Es el momento de los resultados. Que el latrocinio y la ineficiencia de la FVF en tiempos de Esquivel quede en el más absoluto pasado. Que vengan tiempos de apoyo al fútbol rentado nacional, que exhibe una deplorable realidad: equipos sin canchas, jugadores mal pagados, estadios en mal estados, no hay ningún tipo de previsión social al futbolista, entre otros elementos que dejan muy mal parado al fútbol nacional. No obstante, el “negocio” de La Vinotinto goza de inmejorable salud, lástima que los resultados no estén en sintonía con el buen momento comercial de nuestra Vinotinto. Es necesario hacer un proceso completo de reingeniería de nuestro fútbol nacional, de no ser así el fracaso seguirá siendo nuestro destino. Peor aún, los medios seguirán renovando el discurso del “casi lo logramos”, “faltó un poquito para entrar al mundial”. 

Recientemente veía en Te Ves en la mañana a un analista del fútbol nacional que daba su pronóstico acerca de La Vinotinto y sus expectativas en esta Copa América, apenas dijo el analista: “Hay que decir que Venezuela no tuvo la suficiente preparación para esta Copa América y sus oportunidades son escasas…”, zas, de un solo golpe, ipso facto, saltó César Becerra y llamó a comerciales… No, no puede pasar el “efecto Vinotinto”, el efecto de que casi somos, casi llegamos, casi lo logramos. Cualquiera que hable mal de La Gran Vinotinto debe ser proscrito, es un apóstata infernal.

La Vinotinto nos hace feliz, no importa que no gane, no importa que la FVF esté envuelta en corrupción, no importa que Rafa Esquivel esté siendo investigado por el FBI y por la justicia suiza; total, La Vinotinto es un patrimonio construido a base de billete, propaganda y publicidad…nunca a base de buen fútbol y disciplina deportiva. Todo lo cual no tiene nada que ver con los jugadores y ni siquiera tiene que ver con el actual entrenador (quien dicho sea de paso tenía todos los pergaminos para ser el seleccionador nacional), sino tiene que ver con una diligencia mediocre, corrupta y lambiscona. No, La Vinotinto no juega bien, no es un gran equipo, no “juega a nada”, no tiene identidad balompédica. Esa es la verdad. Si en unas horas se logra algún resultado auspicioso para La Vinotinto, no será porque la FVF ha apoyado el fútbol rentado en el país, no será porque hay una estructura futbolística sería, porque los jugadores de los campeonatos locales están bien remunerados y gozan de un extraordinario sistema de previsión social, no será porque hay grandes estadios a lo largo y ancho del país; si se da algún resultado positivo será por el puro pundonor de nuestros futbolistas, pero no porque se haya construido una identidad futbolera nacional.



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Johan López


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