Venezuela de pobres y esclavos

"…más fácil será que un camello entre por el ojo de una aguja, a que un rico entre en el reino de los cielos; nosotros no queremos ser ricos, ¡ser rico es malo!"

Estas palabras icónicas pronunciadas por el "Cristo de los Pobres" Hugo Rafael Chávez Frías, representan el ideal socialista de los gobiernos venezolanos los cuales promueven el clientelismo, el rentismo, el populismo, la cultura de la dádiva, el amiguismo, el ponmedondehaiga, el facilismo, etc. En Venezuela el discurso político está destinado a los pobres, ya que la condición sustancial para que existan los gobiernos es la pobreza, pues todos los gobiernos pretenden ayudar a los pobres pero se nutren administrando la pobreza y la crisis.

Ahora bien, cuando un político, un empresario, un religioso, o un tecnócrata, habla de ayudar a los pobres para que salgan de la pobreza ¿a qué se refieren con "ayudar a los pobres"? ¿Cuál es su concepto de pobreza? ¿Qué estrategia utilizan para "sacarlos" de la pobreza? ¿Acaso la pobreza es un lugar, o una instancia metafísica en la que deambulan algunos desafortunados?

Respondiendo las preguntas desde la última hasta la primera: la pobreza NO es un lugar, ni un estrato social, ni una clase en la cual los pobres viven, ni tampoco es un lugar que algunos pueden encontrar y otros pueden abandonar; la pobreza es consecuencia de relaciones sociales y políticas que hacen que algunos dependan económicamente de otros. En segundo lugar, cuando se habla de salir de la pobreza se plantean medidas para que el pobre se convierta en clase media o en rico, mediante el mejoramiento de su calidad de vida o la adquisición de bienes y servicios. Sin embargo, esta supuesta solución no ataca el problema fundamental: la dependencia económica; pues la adquisición de una mejor forma de vida llena de lujos que antes no se tenían, no significa que el pobre deje de ser pobre, pues su pobreza radica en la dependencia hacia los que le proveen esta "nueva riqueza", que resulta ser una ilusión.

En Venezuela se entiende a la pobreza como una situación de vida precaria, y las soluciones que se proponen para resolver el problema son: la subvención del Estado, o la ayuda de la empresa privada hacia los pobres, dándoles "oportunidades" para salir de la pobreza. Pero resulta que esas oportunidades hacen a los pobres más dependientes, pues el pobre que trabaja para la empresa privada o el pobre que recibe una ayuda del Estado no es independiente económicamente, todo lo contrario, es un esclavo, que vive encadenado económica y psicológicamente a sus jefes o a los empresarios para los que trabaja, y a la institución pública o empresa privada, de la que depende. Entonces hablamos de un problema de dependencia o de libertad, no de igualdad o de mejoramiento de la calidad de vida. El pobre que ficticiamente "sale de la pobreza" mediante esta vía, no importa cuántos bienes haya adquirido ni cuánto haya mejorado su calidad de vida, mientras sea dependiente de su amo nunca dejará de ser pobre, nunca dejará de ser un esclavo. La mano que le da de comer al pobre puede abandonarlo en cualquier momento, haciendo que su supuesta riqueza desaparezca de la noche a la mañana, descubriendo el color de la pobreza que nunca lo abandonó.

¿Gente de clase media alta que hace cola para comprar desodorantes y papel toilette? No eres clase media, ¡eres pobre! En Venezuela existe una conciencia falsa sobre lo que es pobreza, por tener un carro o una camioneta no dejas de ser pobre, por ser un comerciante o un revendedor de mercancía no dejas de ser pobre. Para dejar de ser pobre se necesita ser independiente psicológica y económicamente, esto se logra produciendo verdadera riqueza, desarrollando nuevas tecnologías, produciendo nuevas formas de pensar y de hacer, produciendo nuevo conocimiento, produciendo innovaciones; en fin, producir riqueza no es acumular ceros en una cuenta a partir del jalabolismo, de la especulación o del robo, producir riqueza es transformar la materia otorgándole un valor agregado, y que dicha producción se lleve a cabo de una forma independiente.

Ya nos sabemos de memoria el disco rayado que dice: "Venezuela debe abandonar su modelo rentista, ¡sólo dependemos del petróleo!", ciertamente debemos hacerlo, el venezolano debe generar un nuevo modelo con el cual se genere riqueza. Pero esto no se logra con una visión individualista, es necesario implementar modelos colectivistas de ayuda mutua, que acaben con la dependencia de los venezolanos hacia los gobiernos, hacia el Estado venezolano, y hacia toda forma de explotación y dominación capitalista.

Ciertamente la pobreza es una forma de dominación que las élites políticas y económicas utilizan para el control de la sociedad. Es menester de los venezolanos tomar conciencia de esta realidad y combatirla mediante la crítica y la organización social. Existen diversos modelos como el mutualismo, el cooperativismo, y otras formas de organización social que se implementaron antes de la existencia del Estado Moderno, y que no contemplan dentro de su esquema ni la opresión, ni la explotación, ni al Estado, ni a los políticos, ni a los empresarios individualistas; todo lo contrario, estos modelos promueven el apoyo mutuo y colectivo, que en mi opinión, es lo que necesitamos los venezolanos. Depender de la renta, depender de una institución pública, depender de los empresarios nos hace vivir en esclavitud.

Chávez decía que los venezolanos no queremos ser ricos, porque ser rico es malo. Yo apoyo esa consigna, si se entiende la riqueza a partir de la dominación, ya que si nos hacemos ricos a costa de la explotación de los otros, entonces yo no quiero ser rico. Pero los venezolanos sí queremos dejar de ser pobres-esclavos dependientes del Estado y de la renta, queremos ser independientes y producir nuestra propia riqueza.

miguelvillar88@gmail.com



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