¿Vienen por la Patria de Bolívar?

Comencemos por decir que no vienen solamente por la República Bolivariana. Vienen por la Patria Grande. Por el Continente entero. Es la necesidad visible de recuperar lo que se considera que se está perdiendo. Es asegurar el territorio para salvaguardar su poder económico, político y militar.

Con el grotesco, cínico y pretencioso Decreto Obama, considerando como amenaza a la Nación Venezolana, abriendo la justificación legal interna para una posible agresión militar. Acompañado a su vez con toda la arremetida mediática internacional contra un gobierno y su pueblo que en medio de tanto tropiezo y a su propio ritmo, trabajan por avanzar en la construcción de una sociedad más justa, incluyente y democrática. Lo que se pretende es dar torpes zancadas para recuperar los espacios perdidos en el Continente Latinoamericano y del Caribe. Es utilizarla como cabeza de playa para desbaratar todo aquel avance político, social y económico que se pueda extender por los caminos de los Incas y las demás Naciones Originarias y por la Bicentenaria Ruta Libertaria Bolivariana.

En el contexto mundial, se está dando un reacomodamiento de los capitales. Han ido floreciendo diferentes bloques económicos que se disputan en el día a día los mercados y sus respectivos territorios. Cada cual tiene la urgente necesidad de expandirse para seguir consolidándose y no fallecer en el intento. Reacomodamiento que avizora desde ya, conflictos armados en diferentes escales. Desde "pequeñas" guerras locales o regionales – las cuales ya se han venido dando con toda la destrucción y muerte que acarrean-, hasta una probable y terrorífica Tercera Guerra Mundial.

Mucho se ha dicho de la pretensión imperial sobre las reservas petroleras venezolanas. Se centra en que lo que más codicia el coloso del norte, es el contar con un abastecimiento seguro y cercano del apetecido oro negro. Al asegurarse que la tierra de Bolívar y Chávez, cuenta con la mayor reserva mundial y siendo la más cercana, se sostiene que el objetivo primordial es doblegar al Gobierno y a la República Bolivariana, para que tan deseado tesoro llegue a sus manos en la cantidad requerida y lo más barato posible.

Pero no olvidemos que todo el continente es mucho más que eso. También son una decena de otros minerales, por igual de mucha importancia para la continuidad del pretendido crecimiento industrial y tecnológico. Debemos de sumar toda la diversidad biológica, elemento clave en el desarrollo de la biotecnología, liderada por laboratorios y grandes centros de la investigación en manos de los monopolios multinacionales más poderosos a nivel mundial. Agregando el liquido más preciado de todos, el Agua. Con inmensas reservas acuíferas el Continente Suramericano es hoy la zona más apetecida por los negociantes de la vida.

Sin querer extenderme, pero a la vez sin dejar otros detalles fuera del contexto, Nuestro Continente Latinoamericano y del Caribe, tiene las condiciones ideales para convertirse en la dispensa agro-alimentaria de los países del norte, llamados del primer mundo, a partir de su diversidad eco-sistémica y las calidades de sus suelos aun no agotados y relativamente poco explotados. Sin pasar por alto las grandes extensiones selváticas conservadas hasta hoy en día, que aportan sustancialmente a la regulación climática mundial. Recordemos que ya en el siglo XIX, Estados Unidos dejaba ver sus pretensiones sobre la Amazonia.

En lo político y social, los conflictos presentes en estos lares, se pueden catalogar hoy en día como de baja intensidad en la mayoría de los casos con algunas excepciones y en comparación a otras regiones del mundo, con probabilidades de resolución desde las diferentes instancias qué han ido logrando empoderarse desde la institucionalidad y desde la misma dinámica social y política. Esto podría ser un llamativo seguro a la inversión de estos bloques que se fijan cada día más en lo que hasta hace poco se resaltaba como el Nuevo Mundo. Y por último, somos un mercado que sobrepasa los 400 millones de potenciales consumidores.

En consecuencia y a la vez de manera contradictoria, el aterrizaje de los diferentes bloques de capitales, para extraer la mayor ganancia esquilmando Nuestras Tierras y Nuestros Pueblos, hace que quien se creía con el derecho natural sobre todo el Continente Americano, se sienta desplazado y pretenda con toda su capacidad de conspiración y agresión militar si le es necesario, asegurarse por otra centuria Nuestra Patria Grande con sus tierras y sus gentes. Venezuela pues, no es la única, es parte muy importante de un todo, y ellos vienen por el botín entero, no por partes mínimas ni por migajas.

johnelvisvera@gmail.com



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