Mérida: Tan lejos de la revolución y tan cerca de los oportunistas

Con La Adarga Al Brazo

Mérida, estado con una suerte de maleficio en cuanto a gobiernos regionales se trata, nuestra región que cuenta con la calidad humana y espíritu combativo en sus habitantes, ha sido desgraciadamente “gobernada” en los años de la revolución por militares desarrollistas, socialcristianos bonchones y quien ahora ejerce el gobierno regional, un pequeño imitador de reyezuelo que trata de llevar a Mérida a los tiempos del feudalismo absolutista que no vivió nunca en su historia.

Bueno es necesario resumir el por qué de esta apreciación un poco fuerte sobre los “Gobernantes Revolucionarios” que pasaron por el palacio ubicado frente a la Plaza Bolívar de Mérida, además de explicar los argumentos de por qué pareciera que en vez de elegir en el 2012 un gobernador, elegimos un reyezuelo.

La esperanza de construir la Revolución Bolivariana en el estado Mérida comenzó el 30 de julio de 2000, cuando en una batalla contra uno de los cadáveres insepultos de la cuarta republica-William Dávila- se logro obtener la victoria de las fuerzas revolucionarias con el Cap. Florencio Porras, este gobierno en su primera etapa fue clave para consolidar la activación política de la militancia chavista que convirtió a Mérida en bastión de la Revolución Bolivariana, pero en su segunda etapa la actitud prepotente y no comprometida con el camino socialista trazado por el comandante Chávez, fue la principal característica del gobernante merideño, quien se declaro como un militar Nacionalista y Bolivariano, mas no Socialista; esto desencadeno en una despreocupación por la organización de las fuerzas socialistas, lo se tradujo en la derrota estrepitosa en Mérida de las fuerzas revolucionarias en la reforma de 2007.

Se puede caracterizar el gobierno del Capitán Porras, como el de un militar desarrollista-nacionalista, donde las grandes obras de infraestructura fueron su eje principal y al mismo tiempo el caldo de cultivo para el crecimiento de un empresariado que de socialistas y revolucionarios no tenían ni el nombre.

En 2008 surge una esperanza en la militancia revolucionaria de Mérida, con el Mayor/Doctor Marcos Díaz, medico formado en la ULA, con acercamientos a la doctrina Socialcristiana, pero que desempeño responsabilidades en el gobierno del Capitán Porras que le generaron fama de Buen Gerente y Gran Revolucionario. Pues bien el desarrollo de lo que debió ser un gobierno regional encaminado a la construcción del Socialismo Bolivariano y al fortalecimiento de la organización Socialista en el estado, se convirtió en una fiesta perenne, donde el médico/gobernador no ejerció ningún tipo de liderazgo o vanguardia para tratar de rescatar del olvido a la militancia chavista que había dejada en la retaguardia por su predecesor cuando la revolución se definió como socialista.

Este “gobierno” se caracterizo por generar más bulla que cabuya, es decir un gran aparataje mediático y una alianza con la burguesía ulandina y la constructora, dejando de lado la consolidación del poder popular y llevando a Mérida a cuantiosas derrotas en las elecciones de 2009, 2010 y 2012 -7 de octubre-, donde la derecha convirtió al estado que alguna vez fue vanguardia de la revolución, en punta de lanza del fascismo burgués. Este periodo de 4 años se caracterizo en dejar mas vallas que obras, siendo la su obra más emblemática la Manga de Coleo Álvaro Parra Dávila-por cierto conocido oligarca de la godarria merideña- que fue disfrazada de complejo de equinoterapia.

En diciembre de 2012 el Comandante Chávez junto a la Dirección Nacional del PSUV, deciden darle la oportunidad a un Diputado Merideño de formación socialista y experiencia en la dirigencia estudiantil, el Geógrafo Alexis Ramírez, quien a partir del 16 de ese mismo mes se convertiría en el tercer gobernador de la revolución en la entidad. Desde el 21 de diciembre cuando Alexis-conocido como Palomo- toma posesión del cargo, los revolucionarios y revolucionarias volvemos a creer que se puede avanzar hacia la construcción del socialismo en nuestra región, pero no bien asumido el cargo, el Gobernador se transformo en una especie de reyezuelo traído de la época de los Borgia, donde solo se dedico a imponer su voluntad a costa de cualquier cosa so pretexto de acusar de traidor al legado del Comandante Chávez a quien tuviese posiciones críticas a sus designios o los de su corte de aduladores y oportunistas, ejemplo de esto está la persecución al camarada ex – alcalde de Alberto Adriani.

Desde ese 21 de diciembre Mérida retrocedió de la democracia participativa a feudalismo absolutista en un Gobierno que dista mucho de ser revolucionario y mucho menos socialista, las políticas de gobierno en materia de obras y desarrollo social son nulas, la ejecución de las obras del Gobierno de Calle del compañero Presidente Maduro que son ejecutadas por la gobernación están en menos del 30% las más avanzadas y la gran mayoría ni han comenzado, somos el peor estado en materia de Vivienda, etc…

Pero lo peor de todo es la sumisión que existe en una dirección política regional, que paso de ser desordenada en tiempos de Díaz Orellana a Sumisa y Clientelar -salvo honrosas excepciones- en su actuar bajo los designios ahora de un reyezuelo con cargo de gobernador. La incapacidad política por parte del reyezuelo y sus cortesanos, para defender al pueblo chavista que fue asediado por el fascismo en los meses de febrero a mayo, fue de tal magnitud que ahora la derecha esta tan envalentonada que aspiran usar la herramienta del revocatorio para quitarnos la gobernación del estado-bueno, si es que alguna vez la tuvimos- en diciembre próximo.

Dicen un famoso refrán que los pueblos tienen los gobiernos que se merecen, pero me niego a creer que la Mérida bolivariana, la que se alzo contra la cuarta y la que empezó siendo la vanguardia en la revolución bolivariana se haya merecido gobernadores que en vez de mejorar con el paso del tiempo vayamos de retroceso llegando a lo que tenemos hoy, un feudalismo absolutista con un reyezuelo odiado y su corte de aduladores/oportunistas de oficio.

La fortaleza que hoy revive en el movimiento comunero y popular de la Mérida bolivariana y chavista, será lo que más temprano que tarde abra las grandes alamedas donde podamos empezar de una vez por todas a construir el socialismo de la revolución bolivariana en nuestra entidad.

¡HAGAMOS QUE LADREN LOS PERROS!

¡CON CHÁVEZ Y EL CHAVISMO TODO! ¡CON EL CHAVISMO SIN CHÁVEZ NADA!

conlaadargaalbrazo2021@gmail.com


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