Estimado Comandante en Jefe de la Patria Grande, nuestra República Bolivariana de Venezuela, con absoluto respeto y absoluta responsabilidad me permito proponerle doce ideas precisas y claras como la luna llena para transformar el gobierno socialista y revolucionario que usted dirige.

Primero: Decrete el salario mínimo en DIEZ MIL BOLÍVARES a partir del primero de septiembre de 2014. Homologue la cesta ticket con el 75% del valor de la unidad tributaria por treinta días para todo trabajador del país como compensación modesta a la inflación. Esto añade Bs. 2.857,50 al salario. Y Para mayo 2015 ponga al salario en un nivel más justo.

Segundo: Haga una consulta simple a través de internet, del CNE, del INE, del Psuv y demás medios, organizaciones y plazas públicas, para que cada venezolano con su nombre completo y número de cédula responda la siguiente pregunta: ¿En cuánto cree usted que debe establecerse la nueva y única tasa de cambio para la paridad bolívar/dólar:

• En Bs. 25.

• En Bs. 50.

• En Bs. 75.

• En Bs. 100

• Otro: Bs.___?

Tercero: ¿A partir de qué mes estima que se debe entrar en vigencia el nuevo cambio:

• En septiembre,

• En octubre,

• En noviembre,

• En Diciembre,

• En enero 2015?

Cuarto: ¿Cuál cree usted debe ser el nuevo precio de la gasolina:

• Bs. 1,00

• Bs. 1,50

• Bs. 1,75

• Bs. 2,00

• Otro: Bs.___?

 

Quinto: Señale algún ministro que usted considera que debe ser removido para optimizar la administración pública del Estado:

• Ministro de ____________________

• Ministro de ____________________

• Ministro de ____________________

Sexto: Investíguese, deténgase y múltese duro a todo acaparador, especulador y traficante de productos alimenticios disfrazado de buhonero y de chavista hipócrita y usurero. Termine de una buena vez con esa mafia. Que la comida se venda al pueblo sin mendigarla en colas y sin pagarla con sobreprecio a los mercaderes de oficio.

Séptimo: Saque de la guardia nacional bolivariana a los corruptos y matraqueros que hacen cuanto negocio les da la gana con los capos y distribuidores de la droga, en los puertos, aeropuertos, aduanas, en los puestos de control, en las fronteras del país, en las minas, en las empresas del Estado y con el contrabando de combustible. Esto aplica para todos los policías choros que matraquean al pueblo y reciben mesadas de los vendedores de drogas para protegerlos. Meta preso a todo miembro de los cuerpos de seguridad que mancille el honor de cuidar al pueblo, porque si se les da de baja se organizan para crear bandas armadas sofisticadas, como auténticas sucursales de la empresa mafiosa de los pranes de las cárceles o al menos sus testaferros y de los capos de la droga. También los hay como testaferros de militares enriquecidos y funcionarios públicos. Nadie los toca porque han sido militares, policías o miembros de los cuerpos de inteligencia. Es hora de detener esa hipocresía institucional.

Octavo: Saque del gobierno a los corruptos que tiene en su gestión y que le dan la mano como mansas ovejitas. Esto aplica para los alcaldes bolivarianos. Métales el ojo a los que son y a los que fueron en la Mesa de Guanipa, por ejemplo. Ricachones que salieron de la nada gracias a los gobernadores que nos hemos calado en el estado Anzoátegui. Aplica para todas las regiones, sin excepción. Confisque sus bienes mal habidos y denuncie. El pueblo lo apoyará. Yo también.

Noveno: Haga lo que tenga que hacer con PDVSA porque la empresa necesita una sacudida de mata. Unos dicen que está quebrada y otros que le debe a muchos proveedores y contratistas. La lista de quienes se han hecho multimillonarios con esa empresa de manera directa e indirecta es larga. Gente de la oposición hace grandes negocios como contratistas de PDVSA, por el sólo lucro y no por los beneficios que esta aporta al país a través de las misiones sociales. Ahí se cocinan grandes comisiones, ventas de reportes y tráfico de influencias emanadas desde Caracas, desde Barinas, desde Puerto La Cruz, desde Maturín y desde el Zulia. Esto aplica para que revise a fondo al Seniat. No porque hagan recaudaciones superiores al 125% de la meta 2014 se crea usted el cuento de que ahí la moral está alta. Hay trapos sucios en el Seniat. Usted dispone de los medios para averiguarlo.

Décimo: Todo el sistema de justicia requiere mano firme, transparencia y efectividad. Los pranes de las cárceles gobiernan impunemente en las regiones y mandan a matar a quien les plazca, sobornan, viven como reyes, controlan jueces y procesos judiciales, se burlan del ministerio público y gozan de la libre empresa y el capitalismo salvaje. Se dan el tupé de pagar cuatro y hasta cinco millones en efectivo por una camioneta de lujo o comprar a un teniente, a un coronel y hasta generales. Son intocables y todo poderosos. Eso también es corrupción. La injusticia sigue afectando a los pobres cuando son despedidos, cesanteados o jubilados. Este tema es muy amplio y complejo. También a la oposición se le ha hecho daño desde el mismo comportamiento de los órganos de justicia del país. Eso es inocultable y les crea más rencores y hasta humillaciones. No se humille a nadie para que tampoco nadie nos humille. O aquí se enderezan los torcidos o los endereza la ley. Aplica para los chavistas. Para los opositares también. Sin excepciones ni compadrazgos corruptos.

Décimo primero: Armonice con el sector privado lo que corresponda a la economía. Ya el daño político a ésta es grave e intolerable. Los pobres nos cansamos de este duro batallar. La palabra paz ha sido pisoteada. No le negociemos nuestro credo revolucionario pero démosle la oportunidad de invertir, producir y vender para que no entorpezcan más al Estado. Usted los ha convocado muchas veces y los ha exhibido en cadena nacional, pero hágalo de otro modo, más sencillo, más humilde, menos ruidoso y más efectivo. Quien no produzca y no cumpla la función económica que dice representar, de una vez y sin miedo sáquelo del camino. Facilite las divisas, las materias primas y los canales de regulación. Estos mecanismos también son complejos pero los venezolanos somos ingeniosos, inteligentes y creativos y las cosas pueden mejorar para bien con decencia y honradez. Si el empresario no produce, se queda sin empresa. La política que la ejerza fuera de su industria respetando a sus trabajadores y a los consumidores.

Décimo segundo: Trate de oír críticas directas y sin tapujos. Aló Presidente era la ventana abierta de Hugo Chávez, nuestro comandante Eterno para recibirlas y para orientarse sobre el mapa nacional. No imite el modelo pero busque un medio urgente para lograrlo, por encima de los que ya tiene, por encima del gobierno de calle y los combos de funcionarios. Quizás suene a paternalismo o a individualismo pero muchas manos ponen el caldo morado. No tenemos que ser funcionarios del gobierno para ayudarlo a gobernar. La utilidad a la patria es un deber colectivo, un deber moral esencial pero requiere motivación y seriedad, y nuestra sociedad ha madurado políticamente para asumirlo así. Esto incluye que la oposición participe de las críticas y propuestas pero sin ofensas ni fanatismos y sin pretender sacarlo de la Presidencia por vías caprichosas y golpistas. O son demócratas o no lo son. Quien lo asuma de otro modo que se atenga a las consecuencias. Esta estrategia le va aportar muchos insumos para innovar, crear, enmendar, corregir y experimentar soluciones y acciones de impacto popular. El país necesita vivir más y sufrir menos. Hasta de política sufrimos lo mismo que de economía, desasosiego, incertidumbre, angustia, terrorismo mediático y ataque internacional. Hay que moderar y en lo posible parar eso por la salud de la patria bonita.

Estas ideas suenan a capitalismo puro y suponen una contradicción respecto a la teoría socialista, como me lo hace ver mi colega el doctor José Vallejo, y quizás el ala radical del proyecto bolivariano y del Psuv no lo tolere, pero en esta etapa del proyecto es mejor experimentar que seguir en picada. No renunciaremos a nuestro ideal revolucionario chavista pero hay que torcerle el pescuezo a la gallina en algunos aspectos. Y nuestro pueblo debe comprenderlo así.

Estas son mis humildes ideas. Imperfectas pero sinceras. Agradecido con quien las comparta conmigo y dispuesto a oír a quienes difieran. Siempre con respeto, como debe ser.