Ojo con María Machado, viene de nuevo...

Los lacayos tienen planes para subir la apuesta. Al terrorismo ahora le añadirán el sabotaje y el asesinato selectivo de dirigentes chavistas, artistas, militares, diplomáticos y líderes políticos de los colectivos.

Ellos sienten que tienen la sartén por el mango; y todo porque piensan que el gobierno le teme más a una intervención que el diablo a la cruz. Esa es la trampa en la cual nos hemos encerrado en el propio gobierno: el miedo a una intervención; por ello se ha permitido se desmorone el estado de derecho en varias partes del país. Los terroristas de la oposición y la delincuencia común se sienten poderosos, impunes, le perdieron el miedo a la autoridad, la cual ciertamente, en varios lugares sigue brillando por su ausencia. El gobierno tendrá que recobrar la autoridad perdida para poder restaurar el estado de derecho en todo el país. Un gobierno que no tiene control sobre su territorio, es un gobierno fallido. No se puede permitir que reinen el caos, el desorden y la anarquía en partes del territorio nacional. No se pueden permitir más muertes. ¿Cómo saber dónde atacará un francotirador? ¿Cómo detener la escalada? Declarando el estado de guerra ante el terrorismo neo fascista y con las armas de la patria, militarizando las alcaldías donde brota su violencia y castigando con la fuerza de la ley, en estado de guerra a quien atente contra la vida de nuestro pueblo.

El gobierno tiene la constitución y las leyes para combatir el crimen, el terrorismo, la rebelión, la sedición. No más muestras de debilidad pedimos miles de nosotros quienes vemos con dolor el derrotero que lleva el país en estos momentos. Que el miedo a una intervención no siga paralizando a nuestro gobierno; que se tomen decisiones valientes, justas y necesarias.

La fuerza solo entiende el lenguaje de la fuerza. La fuerza de la ley y la ley de la fuerza que emana del pueblo son la vía para detener la ola de violencia terrorista, las muertes innecesarias y los planes macabros listos para ejecutarse. Los grupos terroristas y paramilitares deben ser enfrentados con las armas; debió hacerse hace mucho tiempo y no se hizo; hoy es absolutamente necesario hacerlo.

De no detener de una vez por todas, por la fuerza ya que no hay otra alternativa, a Nicolás le va a resultar imposible gobernar pues tendrá que invertir la mayor parte de su tiempo en defenderse de los ataques que por todos los flancos están próximos a iniciarse.

Si no puede gobernar ni resolver los problemas del país, cosas que el pueblo espera, entonces, lógicamente, perderemos parte del pueblo; eso es precisamente a lo que apuesta el enemigo. Apuestan a la rebelión de fuerzas populares en los barrios con la escases y la inflación, aderezado con violencia paramilitar y delincuencia pactada con los pranes.

La estrategia golpista tiene muy ocupado al gobierno con la violencia terrorista y amedrentado con la amenaza de una intervención, para que este no actúe contra la rebelión y no pueda gobernar, así el pueblo podrá ser fácilmente manejado para voltearlo contra el gobierno. Ese es el plan. Hay que decretar la guerra al terrorismo y el neo fascismo aun usando la ley habilitante si fuese necesario para imponer la justicia con la ley en la mano, pasar a a la ofensiva, más de lo que se ha pasado en la última semana.

María Mentira está envalentonada y se caga en la constitución, quiere subvertir el orden de la nación a su regreso, tratará de ir a “tomar” la Asamblea Nacional a la cabeza de sus estudiantes “pacíficos” llena de violentas hordas fascistas. Debe ser detenida en el momento de entrar a la patria, ¡ya basta de su traición y su siembra de muerte.

Sin miedo al imperio y con la fuerza infinita que Chávez nos dejó en los corazones, en el nombre del amor al socialismo y a la paz de la nueva sociedad, avancemos en esta guerra con resolución, vacilar es perdernos.

Que se encuentre Unasur es la gran oportunidad para que nuestros países hermanos vean la escalada neofascista que representa esta María Mentira Machado y el imperio que la aúpa. Sin que nada nos detenga, paremos el golpe y castiguemos a los asesinos que incendian la patria.

El pueblo está ansioso por el combate para defender la revolución, con la constitución en la mano y la democracia en el corazón, hagamos lo que se deba hacer para enfrentar el terrorismo paramilitar declarando el país en estado de guerra y militarizándolo para su defensa.

Sin la autoridad y la ley, la quinta república se nos va de las manos.

¡Fuerza Nicolás Maduro, somos un solo pueblo indetenible!

¡No al neo fascismo de María Mentira Machado!!

¡Chávez ya no soy yo, Chávez somos todas y todos!!!


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Raúl Bracho


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