Para la oposición es más importante sentir “una caricia” en el ano que tener patria. Cuando Elías Jaua les preguntó ¿Qué quieren papel tualé o patria? A la dirigencia opositora se le hizo agua la “boca” y de inmediato contestaron ¡Papel!
El papel tualé (por siglas en castellano) es sinónimo de esclavitud, pues muchos y muchas sienten que se les va el mundo si no pueden pasarse el “trozo” de celulosa por sus partes más íntimas.
Nos han alienado de tal forma que nuestra sociedad le cuesta ver otras alternativas al bendito papel. Existen técnicas ancestrales, lástima que la biblia habla de todo y de todos; pero nunca dejó por escrito cómo solucionaba este asunto Cristo y los apóstoles.
Hay continentes enteros que no usan este sistema que contribuye con la desertificación, la contaminación y la deforestación en el mundo, pues hay quienes tienen otras técnicas y aseguran que son más efectivas, saludables e higiénicas que el papel.
Lavarse es la mejor opción, pues se garantiza una limpieza del 100%, no deja “rollitos” de papel enredados en ninguna parte, no irrita, refresca y arrasa con todo rastro, evitando así el tan desagradable “efecto frenazo”.
La oposición, en su afán por hacer el ridículo, quiere hacer del papel tualé un punto de honor, como si en Venezuela no existen temas más interesantes e importantes que discutir; por ejemplo la compra de aviones y armamento por parte de la oposición; la ola de rechazos que ha sufrido el majunche en sus giras; la falta de gobierno en Miranda; solo por nombrar temas que si tiene verdadera relevancia para la vida del país.
Los venezolanos y venezolanas nos la podemos arreglar sin papel tualé, pero no sin patria.
