La revolución herida, ¿de muerte?

Todos sabemos de la conspiración gringa y sus lacayos europeos contra el pueblo de Libia y su infeliz final. En pleno desarrollo sigue el mismo formato contra los hermanos de Siria, ahora le están agregando el código de Irak: las armas químicas.

A nosotros no nos dejarán en paz por un largo tiempo pues el petróleo es la sangre que alimenta la ferocidad consumista y terrorista del mayor imperio de la historia moderna. Si no tenemos claro esa amenaza constante contra nosotros, entonces estaremos perdidos.

Cientos de paramilitares entraron por la frontera del Zulia y tienen varios años instalados en Maracaibo (mercados del centro), lo mismo ocurre en el Táchira. La hiena facista foránea ya está en nuestro territorio. ¿Dónde está la Fiscalía que no imputa los delitos de incitación a la violencia y la traición a la patria? Ésta Fiscala está cometiendo los mismos errores de omisión y negligencia que su homólogo del 2002.

El Comandante supremo nos dejó patria. No podemos perderla. La bestia fascista se acercó a la puerta del proceso revolucionario y sólo la acción contundente del presidente Maduro, su equipo y nosotros podrá espantar esa tenebrosa presencia del crimen multinacional en nuestra Venezuela digna y soberana. Pero esa soberanía no está consolidada ni mucho menos pero si radicalizamos el proceso podemos lograrlo.

Las medias tintas, los errores cometidos en el pasado reciente deben ser corregidos y de eso ya se escribió bastante en éste medio y en algunos del SIBCI. No podemos hacer como el Avestruz, tenemos que encarar la grave situación reinante porque se trata de salvar la dignidad libertadora que nos dejó Bolívar y que reafirmó el presidente Chávez. La causa es harto conocida: vienen por nuestra plataforma energética.

Las acciones inmediatas para solventar la fase crítica de la actual crisis de conciencia política y social son el problema eléctrico, el desabastecimiento de alimentos y su contrabando a Colombia, la grosera especulación de precios y las mafias que no permiten que el colectivo pueda comprar un vehículo a precios decentes como ocurre en todos los países del mundo. Claro, la deficiente labor de ideologización por parte de nuestros medios y el equipo de gobierno completa esa ecuación. No atacar esos nódulos de descontento sería un suicidio. Pero tenemos otro problema de conciencia política: nos estamos entreteniendo con críticas superficiales al instrumento del terrorista mayor, EEUU: H.Capriles y su entorno facista.

Ese siniestro personaje (HCR) y sus socios, pertenecientes ideológicamente a la secta Tradición, Familia y Propiedad, no son ningunos irresponsables, ni locos, ni con discurso de doble rasero ni reculan o desvarían, no, ese clan racista sabe lo que hace, cumple las directrices imperiales al dedillo, saben lo que quieren y a dónde quieren llegar, no nos llamemos a engaños. No hablemos de “caprichitos” o loqueras, no, el plan es claro (parafraseando a nuestro líder) como la luna llena y el hombre lobo fascistoide se manifiesta a diario con una Luna que para él siempre es llena.

Estamos en manos del golpe de timón que el señor presidente Maduro y su equipo deben dar en comunión con el pueblo chavista. Debemos recuperar por lo menos 500.000 votos en 3 años cuando intenten lanzar el revocatorio presidencial para así permitirnos un colchón seguro contra el látigo ponzoñoso de la contrarrevolución antipatria y criminal. Ellos vienen por nosotros. La guerra apenas comienza. No nos equivoquemos camaradas.

efraingran@gmail.com
@Granfran5012


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Efraín José Granadillo


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