Continua la desestabilización mediática en el pais

Hoy quiero referirme a dos infames noticias aparecidas en el diario de circulación nacional Últimas Noticias (ÚN) el día 8 de enero del presente año, la primera, introducida como publicidad en doble página reproduce un artículo del periódico 6° Poder y cuyo dueño es el periodista zuliano Leocenis García, adlátere del escualidismo más rancio venezolano, que se titula Gracias por todo, Fidel. La otra es un pequeño artículo escrito por P. Marcano denominado Cuestionan desempeño de los médicos integrales.

Me tomo la molestia de criticar estos artículos por varias razones:1) Como periodista que soy y con la ética que debe tener todo el que escribe, me exijo y exijo en lo que leo un mínimo de seriedad, veracidad y ética; 2) porque considero que hay que desmontar rápidamente la campaña de desestabilización que se avizora sobre la república y sus instituciones; y 3) porque hasta hace un tiempo consideraba que el diario Últimas Noticias era uno de los pocos que quedan en Venezuela que tiene cierto decoro en el momento de dar una información

Pero infortunadamente Don Dinero puede más que la veracidad de una supuesta “publicidad” y ÚN no aguantó la oferta, independientemente que ese escrito esté plagado de mentiras, infundios, exageraciones y mala intención, pagada por este desgraciado de García que en ese artículo deleznable apunta toda su tarifada artillería mentirosa y falaz a “agradecer” a Fidel por tener “secuestrado” al presidente Hugo Chávez en Cuba.

Primeramente García se dirige al comandante Fidel Castro como si fuera un presidente en ejercicio o como si fuera (así lo quiere hacer ver) el dueño de una hacienda o de un país, y lo ofende (bueno, trata pero no puede) diciendo que Chávez está secuestrado por los médicos cubanos y quiere hacer ver que nadie del gobierno venezolano sabe lo que en realidad le pasa al presidente.

Quiero recordarle a este desgraciado de García que el presidente Chávez está en La Habana pues allí fue que se le detectó su enfermedad y se aprovechó esa coyuntura, a más que la medicina cubana es una de las más avanzadas del continente, pues tiene un concepto totalmente diferente de la practicada en otros países, entre ellos el nuestro, dónde el médico mete el estetoscopio en la cartera del paciente antes que en su corazón.

La medicina cubana ha demostrado con creces su extraordinario aporte al mundo de la ciencia médica, vea solamente como se realizan congresos médicos varias veces al año en ese país, vean sus hospitales como el Hermanos Ameijeiras, y cito a Wikipedia: Hospital Hermanos Ameijeiras, oficialmente Hospital Clínico Quirúrgico "Hermanos Ameijeiras", es el hospital líder de Cuba, ubicado en Centro Habana, su torre bien visible desde el Malecón habanero entre el centro histórico y el barrio de Vedado. Se inauguró en 1982 en el edificio en el cual antes de la Revolución cubana se radicó el Banco Nacional de Cuba. y fue creado por la revolución para brindar al pueblo una atención en el ámbito de los mejores centros de su clase en el mundo. Además Cuba es pionera en descubrimientos científicos como la sustancia denominada Interferón donde el científico cubano Pedro López Saura, uno de los iniciadores de la producción del interferón en Cuba, añadió que el uso de esta proteína "en enfermedades del Sistema Nervioso Central, si bien no son originales de Cuba, es aquí donde han tomado más auge". Un grupo de reconocidos científicos cubanos celebró en esta fecha los 25 años de la producción de interferón en la isla, un producto de amplio uso médico, que sirvió de punto de arranque para la avanzada biotecnología nacional. Y si no está convencido Leocenis, investigue sobre el Centro Internacional de Restauración Neurológica (CIREN), de Cuba donde se combate a fondo contra el mal de Parkinson empleando la más alta tecnología. Y se lucha con otros problemas afrontados por las neurociencias a pesar de las dificultades económicas del país, y de la retinitis pigmentaria y su tratamiento en Cuba mejor no le hablo, pues no entendería un carajo.

¿Y qué decir sobre la altísima misión que están realizando desde hace más de una década los médicos cubanos en nuestro país? En épocas pretéritas de la 4° república no se conseguía una atención primaria para las masas depauperadas que vivían en los barrios de nuestras ciudades, dónde los cinturones de miseria eran la norma de todas las capitales de estado y los cuales, afortunadamente, ahora cada día son mejor atendido por esta revolución. Así que no sea tan grosero y mentiroso cuando califica a Cuba como un país donde, como usted escribe: “Cunde el desempleo, la prostitución y el hambre, del resto, esa economía no produce nada, salvo azúcar y garrote contra quienes disientan del régimen”.

Me gustaría verle la expresión que tomaría su cara si lo pusiera a hablar con un granizadero o heladero como decimos aquí, con quién me topé en el malecón de La Habana el año pasado, quién me dio una lección de geopolítica al hablarme, mientras raspaba un helado, de los diferentes países de América, empezando en Canadá y terminando en la Patagonia argentina, mientras me nombraba sus sistemas de gobierno, las dictaduras que habían sufrido y los presidentes y hombres relevantes que habían marcado historia en el continente, terminando con el presidente Hugo Chávez, ser admirado hasta la saciedad por el pueblo cubano. Así que no hable de la ignorancia del pueblo cubano, hable de su propia ignorancia y de la podredumbre que tiene en su psiquis, la misma que le hace ver distorsionada la realidad de unos procesos, el cubano y el venezolano, que son los han dado y siguen dando, una esperanza a la humanidad entera.

Obviamente, la forma de ver al mundo y su relación inter-países de la derecha fascista y necrófila con quien Ud. comulga, no le permite entender que se puede y debe tener relaciones de hermandad y buena voluntad, dejando de lado el objeto oscuro crematístico que ustedes veneran, que si no hay dinero de por medio, nada es digno de existir.

La otra noticia salida en ÚN es sobre la denuncia que hace nada más y nada menos que la Academia Nacional de Medicina y que reseña P. Marcano, donde dice que: “Una investigación realizada por la Academia Nacional de Medicina sobre el desempeño de los estudiantes de Medicina Integral Comunitaria (MIC) de la primera promoción, cuando ingresaron a las pasantías en los hospitales y luego durante sus primeros cuatro meses de internado rotatorio el año pasado, expone que los jóvenes tienen fallas en su formación y trabajo con los pacientes”.

Me pregunto, ¿Quién carajo, cuando egresa de una universidad no tiene fallas en su formación? Que levante la mano, ¡ajá!, nadie la levantó. Por supuesto exquisitos miembros de tan connotada “academia”, todos ilustres y pomposos médicos peseteros, mercantilistas y deshumanizados, con también ilustres apellidos, que sólo ven en función de cuánto dinero le sacan al seguro de los pobres mortales que caen en sus garras, ni siquiera ustedes se salvaron cuando hacían sus pasantías, y a la prueba me remito, para empezar, el título que obtiene un médico al graduarse es el de médico cirujano, pero no sabe operar, solo lo aprende en el transcurso de sus postgrados, ¿es o no es verdad?

Además, hay una materia que se llama Anatomía patológica, la anatomía patológica humana (AP) es la rama de la medicina que se ocupa del estudio, por medio de técnicas morfológicas, de las causas, desarrollo y consecuencias de las enfermedades. El fin último es el diagnóstico correcto de biopsias, piezas quirúrgicas, citologías y autopsias, y ningún egresado de médico cirujano tiene capacidad de hacer autopsias, ¿Cierto?,

Entonces considero que la razón básica de estas “denuncias” es contribuir a la matriz de opinión comunicacional sobre el “desgobierno” en que se encuentra Venezuela, para, haciéndole el juego a la oposición, tratar de desestabilizar al país, pero les digo una vaina, así como lo dice Leocenis García en sus portadas de ese nauseabundo pasquín 6° Poder, cuando se la echa de pitoniso, pero esta vez con la certeza histórica de una respuesta revolucionaria que ya verán el 10 de enero en Caracas, ¡NO VOLVERÁN!

berhermu@gmail.com



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Bernardo Hernández Muñoz


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