Que al Comandante Presidente lo estén tratando de engañar, como el mismo lo dijo públicamente, con el “éxito” de la recién creada fabrica de helados Coppelia es señal de la magnitud del reto a que se enfrenta la Revolución Bolivariana en esta etapa que se inicio después del 07 de octubre.
Que bueno que cuando la mayoría de nosotros vamos el Presidente ya viene, ya existe el Ministerio que bajo la conducción de la Almiranta Meléndez se está encargando del seguimiento y de la corrección oportuna de las desviaciones de los proyectos y del proceso. Esperemos que la acción de ella, con el apoyo del propio Presidente, haga que la experiencia de los helados Coppelia se convierta en realidad y no en un mero deseo e ilusión de los bolivarianos.
Hacemos un clamor a la Ministra Meléndez para que desde su despacho se atienda también una situación tan vieja como la Revolución misma. Es el caso de las madres procesadoras de alimentos del Programa Alimentario Escolar. Ya hasta el nombre olvidamos de la Ministra de Educación a la que el Presidente le asignó la tarea de incorporar a las madres procesadoras de alimentos a la nómina del Ministerio.
Quienes hemos conocido de cerca la dura realidad que enfrentan las madres procesadoras de alimentos en escuelas y liceos bolivarianos clamamos porque de verdad se haga justicia con estas dignas mujeres que llevan años empujando la Revolución detrás de las cocinas en duras jornadas, algunas veces superando las 8 horas, sin descanso, sin seguro médico, sin seguridad social y recibiendo a duras apenas 60 Bs. por cada una de estas jornadas.
Muchas han emigrado y han decidido irse al mercado capitalista a vender la única mercancía de la que disponen, su fuerza de trabajo; otras han tenido mejor suerte y se han empleado con el mismo Estado haciendo funciones similares pero recibiendo una retribución económica más digna; pero muchas se han quedado y esperan que la Revolución les hará justicia, a eso también apostamos los revolucionarios que cuando vemos la injusticia contra estas mujeres humildes de nuestro pueblo sentimos que el alma se nos estremece.
Con la nueva LOTT apostábamos a que la burocracia del estado se ocuparía del asunto, pero no. Parece que tendrá que ser el propio Presidente quien debe ocuparse de este asunto.
Ministra Meléndez este es un caso viejo y es hasta sencillo evidenciar la ineficiencia del aparato burocrático para resolver este problema, existen las grabaciones de los programas televisivos de las orientaciones del Presidente para atender el caso y de cuál es la realidad que hoy enfrentan las madres procesadoras pasados varios años después.
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