“Una fanaticada exigente: La Cuestión del “Potro” Alvarez.”

En Principio, debo hacer un par de aclaratorias: 1) No me gusta mucho el béisbol Y 2) considero que el reggeton es el peor ritmo musical que ha generado la contemporaneidad. Por lo anterior, no le tengo aprecio al “Potro” Álvarez, de hecho, nunca reparo en su subjetividad.

Sin embargo, atender a su situación actual, me parece algo obligatorio.

Según me cuenta un amigo (fanático del béisbol , a los jugadores de los Yankees de Nueva York, en la reciente postemporada de las grandes ligas, los abucheaban constantemente por su bajo rendimiento ofensivo, sin embargo, me cuenta mi amigo “beisbolero”, apenas uno de estos jugadores bateaba un hit, la muchedumbre explotaba en aplausos en claro reconocimiento al esfuerzo del bateador neoyorkino. Con “el potro”, las cosas son diferentes, desde que sale del dugout es abucheado por una parte de las gradas, y a pesar de que este cumpla con su trabajo y conecte un hit, la explosión de aplausos nunca llega, de hecho, los abucheos se intensifican y traen consigo una lluvia de improperios.

Para nuestra ilustrada oposición, el hecho de manifestar simpatía hacia el proyecto bolivariano del presidente Hugo Chavez, implica también, a su vez, una declaratoria jurada de desprendimiento de todas las identidades que un sujeto haya adquirido durante el transcurso de su vida, es decir; si alguien se le ocurre declararse chavista, automáticamente deja de ser hombre, mujer, hijo, hija, estudiante, obrero, homosexual, poeta, deportista, motorizado, venezolano; ahora simplemente es un Chavista. Un vulgar Chavista.

Esta aplicación identitaria, la observamos hoy en la figura de Antonio Álvarez.

Sin más, la ilustrada oposición venezolana le ha impuesto una identidad. Le intenta arrebatar su condición de ciudadano. Alguna parte de la fanaticada zuliana, iracunda, no soporta la degradación marginal de que en su equipo juegue un chavista. Ellos pagaron para ver jugar a los beisbolistas, ¿Qué hace un chavista allí metido? No lo entienden. Prefieren que el lanzador contrario “ponche” al potro Álvarez, que verlo conectar un jonrón para que gane el encuentro. El mundo al revés, diría Galeano.

Lo mas irónico de la situación, es que esos mismo que abuchean al “Potro” Alvarez son los mismos quieren una Venezuela unida….Sape Gato!

carlosr89.bermudez@gmail.com

Viernes 26 de Octubre de 2012.


Viviremos y Venceremos!


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