Señora del otro lado de la acera, no me gustan las
comparaciones pero hoy quiero decirle que entre usted y yo, hay una brecha muy grande, porque mientras usted esta
entregando canastilla por el aniversario de su partido cuarto republicano,
nosotras las damas de rojos de la quinta república estamos perennemente
trabajando para la comunidad.
Mientras usted esta tomándose una foto para el periódico
local con una mujer de barrio y después se limpia los labios porque la beso, nosotras las damas
de rojos vivimos con dicha mujer informándole donde hay vacunas, jornadas y
cuales son las misiones para que se incorpore.
Mientras usted va al mejor supermercado de la ciudad que vio
la propaganda por televisión y llena de comida su carrito, nosotras las damas
de rojo estamos informando a través de
las redes sociales dónde se esta realizando un mercal con alimentos a bajos
costo, subsidiado por el gobierno.
Mientras usted vive en una gran mansión tipo jaula de oro
atrapada en ella. Nosotras las damas de rojo estamos organizando a la comunidad
para que obtengan sus viviendas propias y dignas de la manera que quieran es
decir; bien sean ya construidas o construidas por ellas.
Mientras usted pasa todo el día en un spa donde le arreglan
hasta las uñas, nosotras las damas de rojo organizamos jornadas médicas,
sociales, veterinaria etc. conjuntamente con organismo gubernamentales nuestros.
¿Y que podemos decir de sus hijos? Mientras estudian en universidades
pagas “y se irían demasiado” como opino un estudiante de ustedes, porque quiere
dominar a la mayoría que somos nosotras, las damas de rojos orientamos a
nuestra población estudiantil para
incluirlo en las universidades con comedor y beca, ubicada donde ellos viven.
Mientras usted disfruta de un fin de semana con sus amigas
jugando cartas, en su casa veraniega en el campo, en la playa o en el exterior
nosotras las damas de rojos llevamos a nuestros viejitos organizados en el club
de la tercera edad a disfrutar de lo mismo que usted y pasando un día diferente
con ellos.
Mientras usted le desea mal y envía odio visceral hacia
nuestro comandante, nosotras las damas de rojos le enviamos amor y le deseamos
todo lo mejor del mundo porque sin él, no seria posible lo que realizamos.
Y por ultimo señora de la otra acera, sino le parece
convincente de que soy una dama de rojo le agradecería que por todo lo que le
he expuesto, no me quiera convencer de que regrese a los 40 años que viví con ustedes,
porque me estaría ofendiendo y por favor no ofenda mi inteligencia. ¿Y sabe que?
me faltaron muchas cosas por decirle de lo hacemos nosotros, en general, los
vestidos de rojo por esta patria Venezuela y por latino América por ahora, porque
somos un movimiento que liderisa nuestro presidente y que queremos un mundo
mejor para todos, incluyéndola a usted.
Profesora
enildathompson@hotmail.com