Reflexiones del 26 S

                                                               Ganamos la Asamblea  Nacional con mayoría absoluta, y esto es bueno recordarlo y decirlo las veces que sea necesario, o las veces que la oposición salga a decir que ganaron la asamblea Legislativa, y que ahora ellos si podrán hacer lo que les venga en gana en la asamblea Nacional. Esto es bueno hacerlo, -recordarlo- porque en este momento y de aquí en delante tenemos que reflexionar sobre este resultado, porque aunque  ganamos, no hemos logrado  la mayoría calificada como queríamos. Nosotros creamos esa expectativa en la población, que si no lográbamos los dos tercios, tendríamos graves problemas en el desempeño de nuestros diputados, en la defensa de la revolución y el presidente Chávez.

Sabemos que el pueblo chavista, tiene tanta fe en su líder Hugo Chávez y por extensión en los otros líderes de la revolución, que sigue y hace disciplinadamente lo que se le pida para conquistar las metas propuestas, acepta todas las obligaciones y sigue todos los procedimientos. Y seguramente cree todo lo que le dicen sus líderes, pero debo recordar, que me refiero al pueblo chavista anillo uno o sea voto duro.

Por ello cuando se les dijo a los militantes que al no ganar los dos tercios en la asamblea nos crearía  un problema, ese pueblo al verificar el resultado obtenido, ahora siente una gran frustración y temor a pesar de la victoria. Sobre esto hay que reflexionar. Porque ese nuestro pueblo chavista (anillo uno), hoy ve con tristeza que su esfuerzo para ganar esta elección fue torpedeado por una parte de los partidarios y simpatizantes de la revolución quienes irresponsablemente no fueron a votar, o hicieron un trabajo deficiente.

Ese pueblo chavista quien es muy sabio y listo, no fue informado del procedimiento electoral para elegir a sus diputados, eso fue una falla de la dirigencia, estamos bien seguros que nuestro pueblo, sabría darle buen uso a esa información para motivar a los electores al momento de patrullar. Por otro lado,  no se puede subestimar al pueblo, no se le puede decir al pueblo revolucionario, que hay sectores de la patria que nos son vedados porque en ellos viven o están los opositores y, que ellos los opositores, siempre ganaran en esos sectores. Yo aprecio en nuestro pueblo, una especie de enconchamiento: sólo es autentico en su medio, en sus áreas, como si fuera clandestino, todavía se aprecia -él mismo pueblo- como un extraño en los supuestos sitios de los ricos o clase media.

El presidente ha  hecho un gran esfuerzo pedagógico para rescatar la autoestima del venezolano, pero la publicidad del consumismo vertida por: la televisión, la radio, la prensa, el cine, las cableras y los centros comerciales, le están ganando la batalla al mensaje del presidente, sobre esto también hay que reflexionar. Porque la falla esta en nosotros, tenemos que ir a las profundidades del problema, las instituciones encargadas de ese adoctrinamiento están fallando.

Nuestro objetivo es conquistar todos los espacios para el socialismo, somos una sola patria, y estamos empeñados en producir la mayor suma de felicidad al pueblo venezolano, es el mandato del padre libertador.

En la dirección del PSUV, hemos olvidado que nuestra revolución es pacífica, pero es una revolución en guerra contra el capitalismo el imperialismo y todo lo que se parezca a opresión de los pueblos y se basa,   en una buena acción de gobierno dirigida a reivindicar a un pueblo tradicionalmente marginado en todos los sentidos y aspectos, y en la utilización de elecciones democráticas como  herramienta para ir construyendo el cambio de un modelo capitalista a un modelo socialista.

¡APLIQUEMOS EN PROFUNDIDAD LAS TRES ERRES!

¡PATRIA SOCIALISTA O MUERTE!  ¡VENCEREMOS!

wiliancastillop@gmail.com
      


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William Castillo Pérez


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